Imagen por https://unsplash.com/@michaelhull
Mimosa e insoslayable,
se extiende tu figura azul sobre el horizonte
Mientras noto que en la distancia
Dos barcos sin rumbo naufragan en la corriente
Como me gusta sentir tu caprichosa mirada
Sobre la radiante piel de las palmeras
Mientras se repite desesperadamente
Un murmullo en tus labios que no besan
El invierno irreverente se asienta sobre mis lentes
Y en el recuerdo de un verano nebuloso
La sal reseca insistente mi piel
Mientras una gaviota se posa en tu silueta.
Vuelves con todo un bello poema, por lo que deduzco que no has estado sin escribir todo este tiempo de ausencia.
ResponderEliminarMe alegra tu vuelta, y que vengas por mi txoko.
Un abrazo y milbuenosdeseos.