Ir al contenido principal

Moleculas divergentes

En el cielo se elevaban unas cupulas azuladas, rodeadas por el brillo de las estrellas invernales. Aún no percibiamos la aurora que enfrentaba los extraños cristales que giraban entorno a las constelaciones. El aire se volvia cada vez más denso y la idea de convertirse en una bola de fuego aveciandoce contra el universo era tentadora, más no factible. Cada paso resonaba fuerte en la tierra, comprometido a continuar en una carrera que quizás habiamos perdido desde el principio, el hombre como lo llamaremos, caminaba aún con la mirada ausente, inmerso en soluciones inconexas que posiblemente no solucionarian nada. Era el principio de un fin, habiamos soñado con comenzar algo grande cuando partimos de la esfera, pero en realidad algo aún mas grande nos impulsaba a nosotros.
En un inicio rondabamos por los planetas, soñando (como sueñan las esferas) con ser más brillantes con cada giro que dabamos, pero habiamos fallado, nos habiamos dispersado en el camino y habiamos emprendido una mision a ciegas. Tomamos los sueños de otros y corrimos, ciegos de emoción hacia un destino desconocido.
El espacio era tan grande como los enigmas que albergaban nuestra mente, desconociamos nuestras formas, nuestra especie, nos habiamos aislado tanto tiempo de nosotros mismos que el recuerdo era tan vago, como una alucinación, a menudo podía recordar tardes de verano, rodeadas de un valle fresco y humedo por un liquido matutino, los nombres y sus significados habian perdido importancia, habia optado por llamarme Z, ya que me otorgaba el ultimo puesto de la escala. Los sentimientos eran igual que la arena, instantes en que se desmoronaba el suelo y que te dejaban una sensación de resequedad, de ansiedad inhóspita, imaginar el contacto era repulsivo, por lo cúal solo existia un proposito, mantener la matrix con vida, y con oxígeno para que el mundo no se volcara y se desvaneciera al instante, algún día llamaron a aquello muerte, pero ahora simplemente significaba la perdida del conocimiento, y el fallo por una misión que desconociamos.
Mis pensamientos fueron interrumpidos abruptamente el hombre habia despertado y se preparaba para partir (dispuesto a irse sin mi, sino respondia a sus urgentes llamados), la temporada de cometas ya empezaba y aquello nos dificultaria el paso hasta la nebulosa O-mega. Emprendimos el viaje temprano, con la esperanza de que el día nos ayudara, pero no fue del todo bueno, al empezar a elevarnos mi esfera madre choco contra uno de los cometas, generando una abulladura en la parte delantera de está, en el lugar donde posiblemente podría estar ubicado un craneo humano, mis musculos flexibles respondieron al instante y combatieron el golpe sin el menor atisbo de dolor, pero aún asi, la capa externa de la esfera botaba el liquido transparente que la recubria, probablemente en dos horas o menos, me encontraria fuera, enfrentandome contra mi ser y todos los problemas que aquello con lleva hasta entonces, buscare una solución con el hombre, quizás pueda trascender a su esfera o desaparecer rapidamente....


Continuará....

Tomada de www.fondosya.com




Comentarios

Entradas populares de este blog

100 COSAS PARA HACER ANTES DE QUE SE ACABE EL AÑO

Lo más probable es que haya sido por envidia o quizás solo fuese el simple placer de pensar en imposibilidades factibles, en cualquiera de los casos está es mi lista de 100 cosas que quiero hacer por lo pronto, espero se animen a hacer la suya: 1 .        Escribir un poema que me haga recordar algo que aún no sucede 2.        Regalarle un abrazo a un desconocido en una noche fría. 3.        Viajar a un lugar con cielo despejado 4.        Caminar sin rumbo unas cuantas horas 5.        Encontrar algo y empezar una colección de cosas perdidas 6.        Rodar colina abajo esquivando los árboles 7.        Hacer un picnic con mi hermana 8.        Preparar un pudín 9.        Darle ese pudín al hombre iguana proveniente de la lejana estrella 10.    Hacer Pan con nueces 11.    Retomar aquella novela que había comenzado hace un año 12.    Darle una sorpresa al hombre de la luna 13.    Preparar un postre con papá que aún no se haya inventado 14.    Salir a caminar c

Historias cortas con puntos suspensivos (Pequeña intromisión desde algún rincón de México)

Ilustración por  ben chen Caminaba por Patriotismo rodeada de olor a jengibre y embelesada con el hilarante tarareo de una canción de la que no podía recordar la letra. Miraba al cielo como quien aún cree en los sueños y anhela dormir en las nubes en plena noche de verano. Le gustaba llamarse así misma estrella y se narraba en silencio historias para conciliar el sueño. Cantaba en el metro Tasqueña de lunes a vi ernes con excepción del martes, día en el que se sentaba en lo más profundo de la estación de camarones a contar hombres con bigote. En el país sobraban personas, pero se carecía de soñadores, por eso sin falta cada martes los buscaba con ojo de costurera y los dibujaba uno a uno en el reverso de servilletas viejas.  Más una noche nadie la volvió a ver y tampoco les importo su ausencia, excepto a mí, quién en el fondo cree que salió volando y ahora nos dibuja acurrucada en el centro de uno de los cráteres de la luna. Para mi mejor amigo, a quién le gusta

Cartas a las estrellas

Querida Dalia, han pasado meses desde que sentí el aroma de tus flores. Hoy mi corazón tiembla ante la fría cuchilla de la realidad ¿Es tan difícil crecer? Me gustaría... e intento ser fuerte ante las circunstancias, pero en el fondo no soy más que un caleidoscopio. Ojalá que me escucharas y como antaño, tus manos relajaran mis adoloridos músculos. ¿Qué estarás haciendo ahora? me pregunto. Y la noche poco a poco se lleva mis palabras.