―Sentate aquí y contame que ha pasado.
―Que decís, acabas de llegar. Estoy perfectamente.
―No, vos querés un beso, más no mío.
―Así suena muy feo. No lo digas.
―El lodo seguirá siendo lodo así venga mezclado con harina, y decorado
como torta.
―Me recordás a algo que escribi. Hace mucho, tanto que ni recuerdo.
―Vos tenes razón. Pero de ilusiones es que vivo.
―¿Sabes en que se parecen un cuervo y una mesa? mejor no averiguarlo.
―Que decís, acabas de llegar. Estoy perfectamente.
―No, vos querés un beso, más no mío.
―Así suena muy feo. No lo digas.
―El lodo seguirá siendo lodo así venga mezclado con harina, y decorado
como torta.
―Me recordás a algo que escribi. Hace mucho, tanto que ni recuerdo.
―Vos tenes razón. Pero de ilusiones es que vivo.
―¿Sabes en que se parecen un cuervo y una mesa? mejor no averiguarlo.
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Escaparates de la luna